¿Qué es la electroestimulación y para qué sirve?
Es muy probable que si estás recuperándote de una lesión tu médico te recomiende algunas sesiones de fisioterapia o algún método de fortalecimiento muscular. Son cada vez más los médicos que aconsejan la tonificación muscular a partir de la electroestimulación, especialmente, en los casos que tenemos la movilidad limitada por alguna lesión.
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Qué opinan los profesionales de la electroestimulación muscular
Dentro de la comunidad fisioterapéutica existe una gran polémica sobre si este tipo de técnica es ideal para todos los casos y si realmente es efectiva. La electroestimulación es una actividad física relativamente pasiva ya que el paciente no debe realizar ningún tipo de esfuerzo en la contracción muscular.
Está comprobado que los programas de rehabilitación más exitosos incluyen la participación activa del paciente ya que es necesario que aprendan los movimientos y ejercicios adecuados para su condición específica. Con la electroestimulación esta falta de implicación física en la recuperación supone un escollo a nivel funcional.
Por esta razón, los fisioterapeutas más escépticos exponen que la utilización de electroestimulación de forma exclusiva en un programa de rehabilitación no es tan efectiva como otros tipos de programas, y aconsejan utilizar este tipo de técnicas como complemento a un programa de rehabilitación integral.
Qué pódemos esperar de la electroestimulación
Si tu fisioterapeuta decide utilizar la electroestimulación dentro del programa de rehabilitación, te debería explicar de forma detallada todo el proceso y los beneficios o ventajas que puedes esperar con este tipo de técnicas. El procedimiento convencional con los electroestimuladores es el siguiente:
Electroestimulación deportiva (EMS) vs fisioterapéutica (TENS)
Cuando hablamos de electroestimulación deportiva nos referimos específicamente a la electro estimulación con tecnología EMS que está enfocada en el trabajo y desarrollo del músculo desde una perspectiva estética.
Por el lado contrario, cuando nos referimos a la electroestimulación con unidades TENS nos referimos concretamente a la electroestimulación fisioterapéutica que está enfocada en el tratamiento del dolor y en la recuperación de la masa muscular y la movilidad funcional.
La principal diferencia que encontramos entre la electroestimulación deportiva y la que se utiliza en fisioterapia es que las unidades TENS están fabricadas con el objetivo de que las descargas eléctricas actúen directamente sobre los nervios, con el objetivo de bloquear el dolor que sufre el paciente para conseguir relajar los músculos.
En cambio, con la electroestimulación deportiva los impulsos eléctricos tienen el objetivo principal de estimular las células musculares con la intención de inducir la contracción muscular. Gracias a este proceso de contracción- relajación conseguimos tonificar los diferentes grupos musculares consiguiendo un desarrollo de nuestra masa muscular.
Los dispositivos TENS presentan en su mayoría, una configuración más compleja en comparación a las máquinas de electroestimulación muscular deportiva. Los dispositivos que se utilizan en fisioterapia incorporan una gama más variada de señales donde podemos escoger diferentes tipos de frecuencia, pulsos e intensidades.
¿Se puede adelgazar con la electroestimulación?
Seguro que más de un día de los que has estado viendo anuncios en la tele has visto publicidad de aparatos de electroestimuación en los que un hombre estaba trabajando sus abdominales tumbado en el sofá leyendo cómodamente. Estas máquinas de electroestimulación son cada vez más habituales en los anuncios televisivos y en los medios relacionados al fitness.
Realmente, este tipo de dispositivos consiguen hacer trabajar los músculos a partir de impulsos eléctricos que inducen al músculo a un trabajo de contracción- relajación y, por ende, favorecen la tonificación y desarrollo muscular. Es un método innovador a la hora de adelgazar y moldear nuestra musculatura.
En estados unidos de realizó un estudio llamado “Los efectos de la electroestimulación sobre la grasa abdominal de las mujeres«:
Durante el estudio los profesionales médicos aplicaron durante una sesión de 25 minutos un programa de electro estimulación muscular en la zona abdominal de las pacientes que, por norma general, es la zona donde se acumula más grasa.
El programa se repartió en 3 sesiones semanales durante 6 semanas con un total de 18 sesiones, donde los fisioterapeutas midieron en la circunferencia de la cintura el índice de masa corporal (IMC), masa grasa subcutánea (que es la grasa encontrada debajo de la piel), y el porcentaje de grasa corporal.
También se incidió en que durante el programa las mujeres no alteraran ni modificaran su rutina física diaria ni su dieta.
Los resultados concluyeron que la electroestimulación ofrece resultados muy efectivos a la hora de adelgazar consiguiendo resultados visibles en tan solo 6 semanas. Los fisioterapeutas observaron que se produjo una reducción significativa en la circunferencia de la cintura y una disminución de la grasa abdominal, subcutánea y grasa corporal.
Según este estudio podemos asegurar que la electroestimulación muscular es eficaz en la reducción de la obesidad en la zona abdominal de las mujeres.
Tipos de electroestimulación
Tu fisioterapeuta utilizará diferentes tipos de estimulación eléctrica para realizar diferentes tareas. Estas pueden ser las siguientes:
Tens
La estimulación neuromuscular eléctrica transcutánea (TENS) es una modalidad de terapia física utilizada para controlar el dolor agudo y crónico en la fisioterapia.
Tu fisioterapeuta utilizará TENS en el tratamiento de zonas de dolor aplicando unos electrodos sobre la zona que quiera trabajar. La actividad de los impulsos eléctricos tiene la función de bloquear las señales de dolor que intercepta el cerebro.
Iontoforesis:
Es un tipo de electroestimulación que se utiliza con el objetivo de mejorar y facilitar la distribución y absorción de los medicamentos en nuestro cuerpo. La corriente eléctrica mejora la absorción de los medicamentos a través de la piel.
Cuando nuestro fisioterapeuta trate una inflamación o una contractura es muy probable que utilice algún tipo de medicamento en el tratamiento. Gracias a la electroestimulación conseguiremos mejorar la absorción del medicamento y potenciaremos su eficacia.
Los impulsos eléctricos son muy beneficiosos al trabajar la calcificación en las tendinitis. Gracias a la corriente eléctrica ayudaremos a reducir la descomposición de los depósitos de calcio que se forman en este tipo de dolencia.
Estimulación eléctrico neuromuscular (EMS)
La NMES es una aplicación de impulsos eléctricos sobre un solo músculo o un grupo de músculos con el objetivo de generar una contracción intermitente del músculo que estamos trabajando.
El fisioterapeuta colocará unos electrodos sobre la superficie de la zona que queremos tratar, en unos puntos que determinará el profesional, en función de la localización y condición del músculo.
La contratación del músculo mediante electroestimulación ayuda a mejorar el ritmo de contracción de los músculos que queremos trabajar. El fisioterapeuta es el encargado de establecer el ajuste y los parámetros de intensidad que oscilaran entre una contracción suave o fuerte, según el tratamiento que se establezca. Junto a la estimulación muscular también se promueve el flujo sanguíneo en la zona tratada. Con la NMES, también conseguimos relajar el músculo cuando trabajamos las contracturas.
Electroestimulación Rusa (corriente de KOTS)
Este tipo de electroestimulación es muy similar a la NMES con la diferencia que este tipo de electroestimuladores utilizan un tipo diferente de ondas. Según la experiencia de miles de usuarios, este tipo de impulsos eléctricos son más fáciles de soportar por lo que tiene una mejor tolerancia por los pacientes.
Corriente interferencial (IFC)
La corriente interferencial es un tipo de electro estimulación que suelen utilizar los fisioterapeutas con el objetivo de reducir el dolor, descontracturar o estimular el flujo sanguíneo en los tejidos musculares.
La corriente interferencial utiliza, como norma general, 4 electrodos en un patrón entrelazado. Esto hace que las corrientes que se ejecutan entre los electrodos «interfieran» entre sí, y permite que el fisioterapeuta pueda utilizar un impulso eléctrico de mayor intensidad de una forma casi imperceptible para el paciente.
Corriente Galvánica
La electroestimulación galvánica utiliza una electricidad de alto voltaje con una frecuencia de nivel bajo con el objetivo de penetrar en el interior de los tejidos musculares. Es una técnica muy utilizada en la mejora de la movilidad funcional, aunque también se utiliza para la relajación de las contracturas y la reducción del dolor lumbar.
Debemos tener en cuenta que, por norma general, la electroestimulación es un tratamiento pasivo ya que el paciente no debe realizar ningún movimiento ni esfuerzo mientras actúa el electroestimulador. Solo la electroestimulación rusa y la NMES precisan de una `participación más activa por parte del paciente durante el tratamiento.
Electroestimulación en diferentes zonas del cuerpo:
Zona Facial
A priori, podemos pensar que los músculos de la cara son músculos que podemos trabajar de la misma forma que hacemos con los músculos de nuestros brazos o piernas. Así que más de un@ habrá pensado que con la electroestimulación podría conseguir que sus músculos faciales fueran más tersos y firmes gracias a esta tecnología. ¡Lamentablemente, esto no es ciertamente así!
Cuando hablamos de los músculos de la cara, es un grupo muscular que continuamente está trabajando, lo hacemos al comer, al sonreír, al hablar, etc. Por lo tanto, la falta de actividad no es un problema para la zona facial, es más la utilización de estos músculos fomenta la aparición de los signos de envejecimiento más habituales como las arrugas y las líneas de expresión.
Por esta razón, podemos decir que la electroestimulación facial no es aconsejable. Es muy difícil localizar de forma separada los diferentes músculos que integran toda la zona de la cara y, además, es una zona con poca masa que ya realiza una actividad constante durante todo el día por lo que es innecesario estimularla.
Abdominal
Es una de las zonas donde más éxito tiene la electroestimulación. El origen de estos dispositivos nació en un laboratorio, donde algunos científicos quisieron entender el funcionamiento de los músculos e indujeron a partir de descargas eléctricas la contracción- relajación del músculo.
Con los años la electroestimulación ha ido evolucionando y, en la actualidad, disponemos de aparatos de electro estimulación especialmente diseñados para trabajar la zona abdominal, como son los cinturones electroestimuladores.
suelo pélvico
El suelo pélvico es una de las zonas con más inactividad de nuestro cuerpo. Es un grupo muscular que incide muy poco en el día a día, y por esta razón, si no le prestamos la debida atención podríamos sufrir algunos problemas a nivel físico derivados de su falta de fortalecimiento. Es importante realizar ejercicios de esta zona, puedes consultar algunos ejercicios que te pueden ayudar al fortalecimiento del suelo pélvico.
A la hora de utilizar este tipo de técnica, es aconsejable hacerlo bajo supervisión de un profesional ya que la zona que vamos a trabajar es delicada. Por norma general, los parches adhesivos se colocan en la zona del perineo y con una frecuencia baja se trabaja la contracción del grupo muscular pélvico.
Cuádriceps
El cuádriceps es uno de los grupos musculares más importantes de nuestro cuerpo formado por cuatro sub-músculos como son el
- Recto anterior.
- Vasto externo.
- Crural o vasto medio.
- Recto anterior.
Es el músculo que se encarga de la estabilización de la rodilla, por lo tanto, un déficit de tonificación de este músculo puede provocar lesiones más allá de lo muscular como pueden ser las de tipo articular de rodilla.
A la hora de colocar los electrodos debemos saber qué tipo de trabajo muscular queremos realizar. Por norma general, pondremos dos electrodos en el recto anterior, a unos 10 cm de cada inserción y, dos electrodos más, en el vasto interno a unos 10 cm de su inserción.
Glúteos
Los glúteos son, también, uno de los músculos más importantes del cuerpo. Participan en la extensión externa, la rotación de la pierna y en la estabilización de la rodilla conectando todas las estructuras del cuerpo. Por esta razón, debemos preocuparnos por tener este grupo muscular correctamente ejercitado y tonificado.
Los glúteos son una zona ideal para trabajar con electroestimulación. A la hora de utilizar estos dispositivos en los glúteos es aconsejable siempre complementar los impulsos eléctricos con algún ejercicio físico a través de diferentes rutinas que deberemos ir cambiando y alternando.
Si complementamos los impulsos eléctricos juntamente con un ejercicio conseguiremos, además de ganar masa muscular, reduciremos la flacidez y la celulitis. Como dijimos más arriba, la electroestimulación ayuda a adelgazar si mantenemos un uso regular junto con una dieta saludable y ejercicio aeróbico.
Beneficios
La electroestimulación es un tipo de actividad fisioterapéutica enfocada en el fortalecimiento de los tejidos musculares. Cuando nos enfrentamos a una lesión o sufrimos un dolor que nos provoca una movilidad funcional limitada, es muy posible que tu fisioterapeuta recurra a la electroestimulación como parte del programa de rehabilitación.
Casos en los que es habitual utilizar la electroestimulación:
A la hora de usar la electroestimulación podemos encontrar diferentes circunstancias que motiven su utilización. Los casos más habituales en los que es habitual utilizar este tipo de técnicas dentro de la fisioterapia, suelen ser los asociados a la tonificación muscular cuando existe una inflamación que nos impide trabajar el músculo con un ejercicio más activo.
También observamos que uno de los casos en los que los fisioterapeutas recurren a la electroestimulación muscular, son los casos en los que el músculo ha experimentado una pérdida importante de masa después de un tiempo prolongado de inmovilización.
Por otro lado, en los últimos tiempos los fisioterapeutas han incluido los electroestimuladores para tratar directamente el dolor de la espalda, concretamente, la zona de la lumbar y las cervicales.
Gracias a estos dispositivos, los músculos experimentan una contracción regular que refuerza la musculatura sin el riesgo de realizar movimientos peligrosos que puedan provocar una lesión. Por este motivo, este tipo de técnicas se ha convertido en una técnica muy efectiva e inocua en la tonificación muscular.
Cada vez son más los casos en los que se está utilizando la electroestimulación en el tratamiento de dolores musculares crónicos. Si estás pensando en este tipo de técnicas para mejorar una dolencia muscular crónica deberías consultar, primero, con un fisioterapeuta. Los fisios son los profesionales que deben valorar de antemano si tu dolencia es adecuada para la electroestimulación.
Riesgos
Si nuestro fisioterapeuta quiere utilizar electroestimuladores en nuestro programa de rehabilitación, debemos informarnos de los diferentes beneficios y contraindicaciones asociadas a este tipo de tratamientos.
Debemos saber que existen algunos riesgos en la utilización de los electroestimuladores y ser conscientes de que trabajamos con dispositivos eléctricos que pueden agravar nuestra dolencia o, incluso, lesionarnos.
Como norma habitual, aunque no es frecuente, los riesgos asociados a este tipo de dispositivos son:
- Desgarro muscular
- Quemadura tisular
- Irritación o enrojecimiento de la piel
Si experimentas un desgarro muscular
Si la corriente eléctrica de nuestro electroestimulador no se ajusta a la intensidad correcta podemos sufrir una lesión importante a nivel muscular. Cuando la intensidad es más alta de lo que nuestro músculo puede aguantar, es muy probable que suframos un desgarro de los tejidos musculares.
En el caso de sufrir una lesión de este tipo, debemos parar inmediatamente el electroestimulador y valorar el alcance la lesión. En la mayoría de los casos, bastará con un pequeño período de reposo, alternado con sesiones diarias de 15 -20 minutos de hielo.
En casos de irritación de la piel.
Algunas modalidades de electroestimulación pueden ocasionar pequeños enrojecimientos o irritación en la zona donde hemos colocado los electrodos. Por ejemplo, la Iontoforesis utiliza un impulso eléctrico de corriente directa que puede causar irritación cutánea.
Las personas con un tipo de piel sensible suelen ser más vulnerables a este tipo de afecciones, así que es aconsejable que después de cada sesión utilicemos un humectante como puede ser el Aloe Vera en la zona de los electrodos y adhesivos. Si observamos un enrojecimiento de la zona tratada durante el uso del electroestimulador debemos parar la sesión y aplicarnos una loción relajante sobre la zona afectada.
Si sufrimos una lesión tisular
Este tipo de lesión suele ir asociado a la utilización de una intensidad demasiado alta para nuestros tejidos musculares. Es una lesión a nivel cutáneo, motivo por el cual, si sufrimos este tipo de lesión debemos para la sesión y tratarnos la piel con el objetivo de recuperarla lo antes posible para poder continuar con el tratamiento.
Es obligación de nuestro fisioterapeuta que la electroestimulación se utilice de forma correcta para minimizar, al máximo posible, los riesgos y peligros relacionados con la utilización de los electroestimuladores.
Alternativas a la electro estimulación muscular
Si por nuestras circunstancias físicas, no podemos someternos a un tratamiento complementado con electroestimulación, nuestro fisioterapeuta nos propondrá otras alternativas con las que podamos completar nuestra rehabilitación.
Si padeces un dolor o sufres una movilidad funcional limitada consulta con tu fisioterapeuta la viabilidad de utilizar este tipo de dispositivos en función de las características de tu dolencia.